jueves, 17 de mayo de 2012

lo que sea.

Se sentaba en el muro y miraba a la nada. El humo de su cigarro trazaba formas por el cielo estrellado. Estaba ahí, pero no estaba ahí.
En sus ojos se reflejaban la luz de mil farolas, pero no dejaba ver nada. Eran como espejos negros, sin profundidad.
Pero yo veía algo, agazapada como estaba entre las sombras, quizá sentada tras un coche o en las ramas de un árbol veía como cruzaba por su mente la idea de saltar. Pero no de saltar al asfalto y a la realidad, no, saltar al otro lado, a la tierra de los sueños y de las múltiples vidas, a ese sitio del que jamás puedes volver.
Lo pensaba, una y otra vez, y siempre lo descartaba.
Ojalá fuese la cobardía lo que le hiciese no hacerlo, al menos eso le habría dado algo por lo que vivir, el miedo.
Pero no, era otra cosa.
Era que en el fondo le daba igual. Había llegado al punto en que cuando le dolía algo decía: "bah da igual, ya estoy acostumbrado".
Los golpes se habían repetido tantas veces que ya casi no los sentía.
Y las excusas que le daban se las comía con un: "claro, lo que sea".
Todo de había dejado de importar.
Pero ahí estaba yo. Todos los domingos a la misma hora.
Compartíamos el mismo amanecer pero él no lo sabía. Y aparecía allí una y otra vez por esa obsesión que tenemos por las almas rotas.
Un susurro rompió la quietud de la noche.
"¿Te vas a quedar ahí siempre o algún día vas a venir aquí?"

miércoles, 9 de mayo de 2012

3MSC;


A 200 por hora, a toda hostia. No quiero enterarme de lo que pasa a mi alrededor. Pero de repente aparece alguien que te dice que aflojes, y cuando aflojas te das cuenta de las cosas, de las pequeñas cosas que verdaderamente importan.

martes, 8 de mayo de 2012

gor, FELICIDADES (7demayo)

Por si no lo sabíais se hacen las mayores locuras junto a ella:
                                                 que tequiero mucho :)

domingo, 6 de mayo de 2012

Te quiero




Tengo siete millones novecientos treinta y tres mil doscientos veintidós defectos, ocho caras diferentes, mil cambios de humor diarios, un millón de cicatrices, una mala ostia que lo flipas, nueve amigos de verdad y una sonrisa de oreja a oreja, provocada por tí.

viernes, 4 de mayo de 2012

mis dos sonrisas :)

No me hace falta mirarlas para saber que están pensando. Puedo sentirlo, ellas simplemente forman parte de mi, son mas que yo. Juntas, somos mas que todo, mas que eso, mas que un siempre que es como un si que nunca acaba. Ellas me llenan de alegria, de risas, cuando me siento mal. Ellas, gastan bromas como cualquiera, pero sus bromas son especiales. Ellas echan piropos de la manera mas sensata y mejor que te puedas echar a la cara, y te tienes que reir, porque es mirarlas y sentir que se para el mundo. A mi no me hace falta nada mas, y hablo en serio, porque lo saben todo de mi, no tengo por qué ocultarles nada, nos entendemos a la perfección y quizás sea por eso por lo que jamás me arrepentiria de haberlas conocido. Cada una me ha enseñado una cosa, y un beso cuando lo necesitas, un "maxi-abrazo" cuando saben que lo necesitas. Quizás una mirada cargada de ironías que llevan al contagio de risa incontrolable, de quedarnos sin respiración, de pegar golpes y de no parar. Empezar escuchando canciones "canis" de las que nos reimos al principio y despues nos terminan gustando, tanto, que la cantamos a todas horas.
Estoy segura que no quiero mas, que con ellas tengo mas que suficiente, tan segura
que son la puta razón de mi sonrisa.

¿Y qué le voy a decir? :)


Que me muero por tenerle cerca todos los días. Que diez horas no bastarían para cansarme de él y sus chorradas; no son suficientes para decirle que no es una persona más en este jodido mundo. Que me encantan sus ojos, su sonrisa, sí, su perfecta sonrisa, su forma de mirar, de caminar. Que a veces le mataría cuando se trae esos andares de chulito, y otras le ahogaría a besos.

Algoesencial,algoincreible,lomejordelmundo



me dicen que ella es un poco especial.


Algún día Tom se comerá a Jerry

                                                                                 Silvestre a Piolín, y yo a ti.

No la cambiaría ni por la luz del sol.

te quiero pequenia.